MDZ tituló, el día de ayer 25-01-11 como “fracaso”, la gestión que se hiciera ante el Arzobispado, sito en la ciudad de mendoza, repudiando las manifestaciones verbales y físicas del malarguino padre Gomez, hartamente conocido por la ciudadanía, a partir de sus histriónicas apariciones en escena.
Ahora bien, desde mi particular punto de vista, persuadido me encuentro, en pensar que la periodista en cuestión tituló de esa forma la nota, en relación con el texto de la misma, la cual refiere como punto primigenio la poca cantidad de personas presentes en el acto mismo. Entonces, coligo que pensó que al haber “poca gente, entonces se frustró el objetivo.
Si esa fue su articulación, evidentemente existe en su comprensión, una evidente distorsión respecto de la problemática, sus actores y la implicancias del planteo realizado., a saber:
1.- Parangonar, en cantidad de personas, un reclamo de un grupo de ciudadanos, en relación a la eficacia o eficiencia del mismo, escapa al sentido inicial de la protesta que consiste en llamar la atención a la burocracia eclesial respecto de un exabrupto de un miembro de su número, al verbalizar y actuar formas intolerantes, absolutistas y por ende antidemocráticas. Situación esta, (la de reclamar) que fue acompañada por más de una decena de Organizaciones Sociales que apoyaban el reclamo, y que si todos sus miembros no estaban en eses momento, mayoritariamente no lo hicieron porque tenían que desempeñar sus labores, tal como lo estaba haciendo MDZ.
2.- Pensar que las luchas sociales, se frustran o se logran, siempre y cuando empiezan con un apoyo masivo, definitivamente es desconocer la génesis de la mayoría de las reivindicaciones sociales logradas por el ser humano, a lo largo de su historia, vinculadas a la satisfacción de sus necesidades fundamentales. No obstante ello, y a pesar de MDZ, la presentación referida tuvo un importante apoyo, y se visualiza que irá in crescendo.
3.- En lo que se refiere a su eficacia, el planteo citado, ha resultado harto exitoso, ya que este grupo de coterráneos, ha logrado algo que ni nuestros representantes, han, tan siquiera intentado, que consiste en pedir explicaciones a una corporación en particular, (Iglesia católica) respecto de su mal actuar, al no poner coto a la actitud antidemocrática de uno de sus miembros. Desgraciadamente, fue exitosa, porque ello demuestra que nuestros representantes, (Poder Ejecutivo provincial y municipales, Poder Legislativo provincial y municipal), ni siquiera han atinado a realizar una impronta al respecto, siendo que actitudes como la descripta minan en su más profunda esencia el sistema democrático, del cual ellos se nutren económicamente y lo han convertido en un trabajo de muy buena remuneración que conlleva muy poca dedicación, toda una sinecura.
4.- Por último, puede ser que la periodista, no hubiera estado convencida del infausto título, y solo lo hubiera hecho, en una actividad de “cortar y pegar” de otro colega en otro medio, lo que le agregaría una mancha más a su obrar, en vez de eximirla de responsabilidad.
Convencido estoy que el ejercicio del periodismo, es una actividad muy importante en estas épocas de instituciones republicanas donde prima el pragmatismo sin ética y la corrupción sin castigo. Por ello mismo más que nunca hay que tratar de ser cabal, es decir ajustado a principios y valores, y tratar de evitar el facilismo.
Brindo por el reclamo, esperemos que nos encontremos con una contestación respetuosa, de la cual se forme la contradicción, a través de la cual nos permite superar nuestras inconsecuencias como sociedad.
Fuente: Marcelo Puertas Vernengo - MDZ Online, 26/01/11 - http://www.mdzol.com/mdz/nota/268807-cronica-de-una-contradiccion/
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